Page 16 - Revista Cambia tu Historia
P. 16
Relatos de Arpilleras
Revista Cambia tu Historia
Construyendo Vidas
Por Cristina Correa
La idea de participar en el taller de arpilleras nació en un presentes. Sentí que el miedo al cambio, tan natural
momento de profunda introspección, cuando sentí la y humano no debía paralizarme, porque en cada giro
necesidad de encontrar un espacio para reconectarme inesperado hay un aprendizaje valioso. Mi arpillera se
conmigo misma. Anhelaba un lugar donde pudiera convirtió en un recordatorio de que lo esencial es vivir
relajarme, dejar fluir mis pensamientos y dar forma a con plenitud cada momento y que el amor, ese amor
lo que llevaba dentro. Al inicio, se nos propuso plasmar que damos y recibimos, es el hilo invisible que sostiene
en nuestras obras algo íntimo y personal, así, empecé nuestra existencia.
con un diseño simple, un mapa imaginario de mis
expectativas, pero, como suele ocurrir en la vida, lo que Al mirar mi obra terminada, percibo un tapiz donde
concebimos inicialmente rara vez permanece igual, mi el pasado, el presente y el futuro se entrelazan con
arpillera comenzó a transformarse, a respirar, a contar armonía. Reconozco en él mis virtudes y defectos,
su propia historia, reflejando no solo lo que esperaba, mis luchas y mis logros, y me abrazo a la certeza de
sino lo que soy y lo que he vivido. que la vida es finita, pero rica cuando se vive con
amor. Agradezco profundamente a las mujeres del
A medida que avanzaba puntada a puntada, comprendí taller, a las compañeras y a la unidad de Patrimonio
que mi obra era una metáfora de la vida misma, un tejido de CFT Lota Arauco, cuya iniciativa y compromiso han
que se va construyendo con cada decisión, cada sueño sido una fuente inagotable de inspiración. Gracias a
y cada ilusión, pero también con las circunstancias este espacio, no solo pude expresar mi historia, sino
que escapan a nuestro control. Aprendí que la vida no también recordar que cada puntada que damos en la
es una línea recta, sino un viaje impredecible donde vida deja una huella, un pequeño testimonio de lo que
las oportunidades para reinventarnos siempre están fuimos y de lo que amamos.